viernes, 31 de diciembre de 2010

Meditaciones día a día (Osho)

27. Etiquetas

"No utilicéis las palabras «felicidad» e «infelicidad»; porque están cargadas de juicios. Simplemente observad sin juzgar…
este estado de ánimo «A» y este estado de ánimo «B»".

¿Lo entendéis? El estado de ánimo «A» ha desaparecido, y ahora está el «B» y vosotros simplemente sois observadores. De pronto os dais cuenta de que cuando llamáis felicidad a «A», no es tan feliz, y cuando llamáis infelicidad a «B», no es tan infeliz. Al llamarlos «A» y «B» se establece una distancia.

Cuando decís «felicidad», la palabra da a entender mucho. Estáis diciendo que queréis aferraros a ella, que no queréis que se vaya. Cuando decís «infeliz», no solo estáis empleando una palabra; esta da a entender mucho. Estáis diciendo que no la queréis, que no debería estar presen­te. Todas estas cosas se dicen de forma inconsciente.

Así que emplead estos términos para vuestros estados de ánimo durante siete días. Simplemente sed observadores... como si os hallarais sentados en lo alto de la colina y por el valle pasaran nubes, amaneceres

y crepúsculos... a veces es de día y a veces es de noche. Simplemente sed observadores en la colina, en la lejanía.


miércoles, 22 de diciembre de 2010

Yoga

Capítulo 9:

Cuándo realizar los ejercicios

El máximo beneficio de los ejercicios se obtiene si se practican por la mañana. Realiza la serie completa de los 4 ejercicios en el orden indicado, nada más despertarte y antes de desayunar o de irte a trabajar. El cuerpo se va ajustando entre los últimos 5 minutos de sueño y la primera hora después de despertarse. Durante este tiempo todo el metabolismo pasa por un proceso de despertar definitivo. Por eso es el momento ideal para ejercitar el cuerpo.

La práctica de algún ejercicio físico por la mañana ayuda al cuerpo a despertarse por completo. Es una buena manera de cuidarte pues el cuerpo y la mente se preparan así para enfrentarse al día y para tratar las situaciones estresantes e incómodas con más habilidad.

La serie de ejercicios que se proponen, pueden realizarse a cualquier hora del día o de la noche, para aliviar cualquier tipo de tensión que surja: antes de una reunión seria, después de una discusión (aunque mejor sería antes de entrar en ella), antes de dormir, etc.

Para terminar resumimos la tabla de ejercicios que te aconsejamos empieces cuanto antes, sólo te llevará de 10 a 18 minutos al día. Pruébalo, experimenta por ti mismo y verás cómo funciona:

Ejercicio

Tiempos

Fortalecimiento del corazón

De 1 a 3 minutos Descansar 1 minuto y medio

Levantamiento de caderas

De 12 a 26 veces Descansar 1 minuto y medio

Gran triángulo

De 1 a 3 minutos Descansar 1 minuto y medio

Rotación del cuello

12 veces en cada dirección Descansar 3 minutos


Fuente: Cursos Mailxmail

Yoga


Capítulo 8:

Rotación del cuello

El ejercicio más simple es también el más importante. Es fundamental porque relaja la parte donde se juntan el cerebro y la médula espinal, el cuello.


Los músculos del cuello pueden restringir el flujo de sangre al cerebro. El cuello está hecho para girar. Si no puedes girarlo, significa que el cerebro no está recibiendo la cantidad de sangre adecuada. Además, los impulsos nerviosos que van del cerebro al resto del cuerpo, disminuyen.


Los nervios permiten sentir la vida. Si el cuello está suelto y flexible, te sentirás más vivo y con más capacidad para responder a las exigencias de la vida.

Posición del ejercicio. Puedes realizar este ejercicio en cualquier posición sentada. Mantén la columna derecha (y los pies pegados al suelo si estás en una silla). Cierra los ojos.

Cómo realizar las rotaciones de cuello. Comienza a girar
el cuello, llevando la oreja derecha hacia el hombro derecho. Gira la cabeza lentamente hacia atrás de modo que la barbilla mire hacia el techo y completa la rotación llevando la cabeza hacia el pecho, es decir, volviendo a la posición inicial.

Duración del ejercicio. Realiza 12 giros a la derecha. Repite los mismos 12 giros hacia la izquierda.

Respiración. Inhala cuando lleves la cabeza hacia atrás y exhala cuando lleves la cabeza a lo largo del pecho. Lleva la cabeza hacia el centro y siente el efecto relajante del ejercicio durante unos minutos.

Veamos:


Fuente: Cursos Mailxmail


Yoga


Capítulo 7:

Comentarios e ilustración al gran triángulo

Lo más importante es disfrutar del ejercicio. El cuerpo responde mejor si los ejercicios se hacen con gusto y no como si fuera una dura tarea. Da igual el tiempo que puedas mantener la postura, siente lo que sucede en tu cuerpo, y tómate con buen humor las incomodidades que puedas sentir.

La clave siempre es la respiración. Para mantener la respiración larga y profunda, al inspirar empuja el aire hacia la parte inferior de los pulmones distendiendo el área abdominal. A continuación empuja el estómago hacia dentro y levanta el pecho mientras continúas llenando la parte superior de los pulmones. Exhala completamente, suelta el pecho primero y después contrae el abdomen.
Veamos:

Fuente: Cursos Mailxmail

Yoga

Capítulo 6:

Alivia el sistema nervioso

El ejercicio del 'gran triángulo' está indicado para fortalecer el sistema nervioso. La próxima vez que sientas que la impaciencia te corroe, que tus frustraciones te comen o que vas a descargar tu rabia contra alguien, piensa en hacer este ejercicio.

Cómo actúa el ejercicio sobre el cuerpo:

-ayuda a que la respiración se calme y se haga más lenta y profunda;

-relaja casi todos los músculos del cuerpo;

-estimula las funciones de los órganos abdominales, en particular, los riñones, el hígado y los órganos genitales.

Posición del ejercicio. Apóyate sobre tus rodillas y tus manos, es decir 'a cuatro patas'. Manteniendo las manos y los pies sobre el suelo, levanta las caderas hasta formar un triángulo de 60 grados (véase ilustración en siguiente capítulo). Baja la cabeza y relájala durante todo el ejercicio. Las manos y los pies guardan una separación de unos 60 cm. Equilibra el peso entre las manos y los pies, y mantén las rodillas bien rectas.

Duración del ejercicio. Respira, lenta y profundamente, a través de la nariz y continúa por lo menos 1 minuto. Mantén esta postura como máximo 3 minutos. Para llegar a este tiempo, aumenta gradualmente 15 segundos por día, y el noveno día serás capaz de mantener la postura el tiempo completo.

La respiración te ayudará a mantener la postura. Evita respirar por la boca, pues puedes provocar hiperventilación. No pienses en los temblores o la incomodidad, y concéntrate en la respiración.

Para terminar. Inhala y retén el aire durante 10 segundos, exhala y relájate. Sal lentamente de la postura y levanta la cabeza sólo al final. Siéntate con las piernas cruzadas y la espalda recta y mantén los ojos cerrados para observar los cambios que sientes en tu cuerpo.

Fuente: Mailxmail

Yoga

Capítulo 5:

Comentarios e ilustración al levantamiento de caderas

Consulta al médico, antes de comenzar este ejercicio, si tienes algún antecedente de dolor en la parte baja de la espalda.


Si no puedes agarrarte los tobillos, mantén los brazos extendidos a lo largo del cuerpo y pegados al suelo. Levanta las caderas ayudándote de los brazos.

Deja llevarte por la respiración. Inhala cuando subas las caderas y exhala al bajarlas. Si te concentras en la respiración, ella trabajará por ti y te facilitará el ejercicio.

Mantén los ojos cerrados durante el ejercicio para que puedas sentir el ritmo del cuerpo al subir y al bajar. Al terminar descansa sobre la espalda durante dos minutos y disfruta el efecto revitalizante del ejercicio.

Veamos:

Fuente: "Cursos Mailxmail"

Yoga

Capítulo 4:

Relaja el área abdominal

El siguiente ejercicio de 'levantamiento de caderas' está indicado para aliviar el estrés del área abdominal. Muchas personas almacenan las tensiones en los músculos abdominales. Pero la tensión no se queda aquí y se expande a todos los órganos abdominales, el estómago, el intestino, el páncreas, etc. Esto hace que disminuya la vitalidad física y la salud corporal en general.


Una persona sin tensión abdominal es menos propensa a padecer pesadez de estómago, diarreas, úlceras u otras molestias.

Posición del ejercicio. Túmbate sobre la espalda y relájate unos segundos. Flexiona las rodillas y lleva los talones hacia los glúteos, manteniendo los pies sobre el suelo. Sujétate los tobillos con firmeza y lentamente levanta las caderas arqueando la columna baja y levantando el vientre (véase ilustración en el siguiente capítulo).

Respiración. Inhala lentamente cuando levantes las caderas. Retén el aire mientras estiras hacia arriba, tan alto como puedas. Baja despacio, mientras exhalas por la nariz.

Duración del ejercicio. Repite lentamente el ejercicio un mínimo de 12 veces, sincronizando la respiración con el movimiento de las caderas. El máximo número de repeticiones para este ejercicio es de 26. Añade progresivamente una repetición más cada día hasta llegar al máximo.

Para terminar. Inhala y retén el aire durante 10 segundos. Relájate abajo, con las piernas estiradas sobre el suelo y siente el efecto energizante y relajante del ejercicio.

Fuente: "Cursos Mailxmail"

Yoga

Capítulo 3:

Fortalecer el corazón, la imagen y algunos comentarios

Mantén la postura aunque tu mente diga que los bajes. Cuando tengas los brazos arriba empezarás a pensar en muchas cosas. Alguno de tus pensamientos te estará pidiendo a gritos que bajes los brazos antes de terminar con el tiempo establecido de 1 a 3 minutos. Trata de continuar y mantener los brazos en esa posición para experimentar su efecto.


Los brazos pueden temblar o adormecerse. Este cosquilleo en los dedos se debe al incremento de la actividad nerviosa en las manos. El temblor es producto de la relajación de la tensión. Es normal, continúa.

La clave del ejercicio. Concéntrate en la respiración más que en la incomodidad que sientes en los brazos o en los hombros. Mantén los codos bien firmes. También te ayudará si te concentras en los codos. El ejercicio será cada vez más fácil y cada vez percibirás más beneficios.

Veamos:



Fuente: "Cursos Mailxmail"







Yoga

Capítulo 2:

Pon en forma tu corazón

El primer ejercicio consiste en relajar el área del corazón. Se le conoce por el nombre de 'fortalecer el corazón' y está especialmente indicado para personas con problemas cardíacos. Una vez terminado te sentirás ligero, ya que elimina la tensión de toda la parte superior del cuerpo.

Cómo actúa el ejercicio sobre el cuerpo. Estimula los nervios que van desde la punta de los dedos y pasan por las manos y los brazos hasta el pecho, y se reúnen en el centro del corazón. Cuando se mantiene la posición durante el tiempo establecido, los músculos del corazón se relajan por sí solos.

Relajación de la parte superior del cuerpo. Los pulmones se expanden y se produce una limpieza general de todo el torso debido a la actividad que se genera en el sistema linfático. Como los músculos de los hombros y del cuello están flexionados durante el ejercicio, al bajar los brazos, una ola de relajación fluye hacia estos músculos.

Posición del ejercicio. Siéntate en el suelo con las piernas cruzadas y la espalda completamente recta. Puedes sentarte en una silla, con los pies paralelos y bien pegados al suelo y la columna derecha. Cierra los ojos.

Levanta los brazos hasta un ángulo de 60 grados y mantén los codos bien firmes con las palmas hacia arriba y los dedos extendidos. Respira lenta y profundamente inhalando y exhalando por la nariz.

Duración del ejercicio. El tiempo mínimo para mantenerse en esta postura es de 1 minuto y el tiempo máximo, de 3 minutos. Si no eres capaz de mantener la postura durante el tiempo máximo, comienza con 1 minuto y aumenta el tiempo 20 segundos cada día. Al octavo día, serás capaz de resistir el tiempo completo.

Para terminar. Inhala profundamente y retén el aire durante 10 segundos. Luego exhala, baja suavemente los brazos y relájalos sobre tu regazo. Mantente sentado un minuto más, con los ojos cerrados, para sentir el efecto calmante del ejercicio.

Fuente: "Cursos Mailxmail"

martes, 21 de diciembre de 2010

Yoga

Hola a todos, desde hoy comparto con Ustedes un curso de introducción al Yoga, la fuente de esta presentación es "Cursos Mailxmail".

Espero que les sea útil, y que la Luz del universo esté con Ustedes.


Introducción al Yoga

Capítulo 1:

El yoga y la salud

La ciencia y las técnicas del yoga tienen una tradición milenaria. Según la antigua tradición del yoga, durante la Edad de Oro de la Humanidad, civilizaciones enteras dominaban esta ciencia, que aplicaban para aumentar y garantizar la salud, la felicidad y la calidad de vida.


La difusión del yoga en Occidente es muy reciente. Durante varios siglos todas estas técnicas permanecieron en manos de yogis y maestros, y sólo recientemente se ha transmitido a Occidente. De esta tradición procede Yogi Bhajan, oriundo del norte de la India, que vino a Occidente en 1968 para enseñar el yoga Kundalini. De sus enseñanzas tomamos los ejercicios que aquí se muestran.
El yoga Kundalini, según Yogi Bhajan, equilibra el sistema nervioso y estimula la secreción endocrina. El sistema nervioso se vuelve resistente y maneja mejor el estrés y las tensiones. Cierto nivel de estrés resulta necesario para vivir, supone desafío y tensión. El problema es cuando la persona se desequilibra, porque el nivel de exigencia es demasiado elevado o porque el sistema nervioso es débil e inestable.

Si aprendes a relajar la tensión física de tu cuerpo, experimentarás una gran calma mental. El cuerpo refleja el estado anímico de las personas. La actitud que tenemos hacia la vida se plasma en los músculos, en las posturas, en la flexibilidad del cuerpo.

-las preocupaciones y enfados se reflejan en cuellos tensos;

-el coraje tiene su espejo en los dientes apretados;

-las decepciones se ocultan en los hombros caídos;

-los problemas y angustias se filtran en nuestras digestiones, dolores de cabeza, insomnio.

Con la práctica diaria de una serie de ejercicios sencillos podrás eliminar la tensión cuando surja. Se han seleccionado cuatro ejercicios de yoga sencillos y fáciles de practicar, que te darán la posibilidad de relajarte totalmente en unos minutos y cuando lo precises. El estar relajado o no se convierte en una decisión que puedes tomar cuando hayas aprendido los ejercicios que te proponemos.

Fuente: "Cursos Mailxmail"

viernes, 17 de diciembre de 2010

Meditaciones día a día (Osho)

26. Jugar un papel

" Jugadlo, pero a sabiendas... Jugad vuestros juegos, sean cuales fueren; no los reprimáis. Si surge la idea, jugadla Tan perfectamente como os sea posible, pero plenamente alertas. Disfrutadlo, y otros también lo disfrutarán".

Aunque una persona juegue un papel, hay un motivo para ello. Ese papel tiene alguna importancia para la persona. Si el juego se juega a la perfección, algo del inconsciente desaparecerá, se evaporará, y quedaréis libres de una carga.

Por ejemplo, si queréis jugar como un niño, eso significa que en vuestra infancia algo ha permanecido incompleto. No pudisteis ser un niño como quisisteis ser, alguien os detuvo. La gente os hizo más serios, os obligó a ir más allá de vuestra edad, os hizo aparecer más adultos y maduros de lo que erais. Algo ha permanecido ahí incompleto.


jueves, 16 de diciembre de 2010

Meditaciones día a día (Osho)

25. Felicidad

" No hay causas externas para la felicidad o la infelicidad; solo son excusas. Poco a poco, uno empieza a entender que es algo que uno lleva dentro que no deja de cambiar; y que no tiene nada que ver con las circunstancias exteriores".

Es algo dentro de vosotros, una rueda interior, que no deja de moverse. Simplemente observadla... es muy hermosa, porque al ser conscientes de ella, se ha conseguido algo. Ahora entendéis que estáis libres de las excusas exteriores, porque fuera no ha pasado nada y, sin embargo, vuestro estado de ánimo ha cambiado en cuestión de minutos de felicidad a infelicidad.

Eso significa que la felicidad y la infelicidad son vuestros estados de ánimo y que no dependen del exterior. Es una de las cosas más básicas que hay que comprender, porque entonces se puede hacer mucho.


sábado, 11 de diciembre de 2010

Meditaciones día a día (Osho)

24. Autoridad

" Jamás le preguntéis a alguien qué está bien y qué esta mal. La vida es un experimento para averiguarlo".

Cada individuo ha de estar consciente, alerta, vigilante, experimentar con la vida y averiguar qué es bueno para él. Sea lo que fuere lo que os aporta paz, lo que os hace felices, lo que os brinda serenidad, lo que os acerca más a la existencia y a su inmensa armonía, es bueno. Y aquello que os crea conflicto, desdicha, dolor, está mal. Nadie más puede decidir por vosotros, porque cada individuo tiene su propio mundo, su propia sensibilidad. Es único.

jueves, 9 de diciembre de 2010

30 años sin John Lennon

Este es un pequeño tributo a un defensor de la paz y la espiritualidad.





Meditaciones día a día (Osho)

23. Cosas esenciales

"La meditación significa ser uno mismo, y el amor significa compartir el propio ser con otra persona. La meditación os da el tesoro, y el amor os ayuda a compartirlo. Estas son las dos cosas más básicas, y todo lo demás no es esencial".

Hay una antigua anécdota acerca de tres viajeros que llegaron a Roma. Fueron a ver al Papa, quien le preguntó al primero: « ¿Cuánto tiempo te vas a quedar?». El hombre respondió tres meses. El Papa dijo: «Entonces podrás ver bastante de Roma». En contestación al tiempo que iba a quedarse el segundo viajero, repuso que solo podía permanecer seis semanas. El Papa comentó: «Entonces podrás ver más que el primero». El tercer viajero anunció que únicamente podría quedarse dos semanas en Roma, a lo que el Papa indicó: «Eres afortunado, porque serás capaz de ver todo».

Quedaron desconcertados... porque no entendían el mecanismo de la mente. Pensadlo; si tuvierais una vida de mil años, os perderíais mucho, porque no dejaríais de postergar cosas. Pero como la vida es corta, uno no puede permitirse el lujo de posponer. Sin embargo, la gente lo hace... y a su propio riesgo.

domingo, 5 de diciembre de 2010

Meditaciones día a día (Osho)

22. La fragilidad del amor

"No penséis que el amor es eterno. Es muy frágil. Es tan frágil como una rosa. Por la mañana está ahí, y por la noche se ha ido. Cualquier cosa pequeña puede destruirlo".

De hecho, cuanto más elevada es una cosa, más frágil es. Ha de ser protegida. Una piedra permanecerá, pero una flor desaparecerá. Si arrojáis una piedra contra una flor, la primera no saldrá dañada, pero la segunda será destruida.

El amor es muy frágil y delicado. Hay que ir con mucho cuidado con él. Se puede causar tanto daño como para que la otra persona se cierre y se ponga a la defensiva. Así es como nos cerramos. Si lucháis demasia­do, el otro comenzará a escapar de vosotros; se tornará más y más frío, más y más cerrado, para no volver a ser vulnerable a vuestro ataque. Entonces lo atacaréis más porque os resistiréis a esa frialdad.

jueves, 2 de diciembre de 2010

Retornando a la inocencia

Para acompañar la meditación de hoy les dejo esta canción.



Meditaciones día a día (Osho)

21. Como un niño

"Estamos separados solo en la superficie, en lo más hondo no estamos separados. Únicamente lo está la parte visible; la invisible sigue siendo una".

Los Upanishad dicen: «Aquellos que creen saber, no saben», porque la misma idea de que sabéis no os permite saber. La misma idea de que uno es ignorante os vuelve vulnerable, abiertos. Como un niño, vues­tros ojos están llenos de asombro. Entonces resulta difícil decidir si los pensamientos son vuestros u os llegan del exterior, porque uno ha per­dido todas las amarras. Pero no hay necesidad de preocuparse, porque básicamente la mente es solo una, es la mente universal... llamadla dios, o en términos jungianos, el «inconsciente colectivo».

Estamos separados solo en la superficie, en lo más hondo no estamos separados. Únicamente lo está la parte visible; la invisible sigue siendo una. De modo que cuando os relajáis y guardáis silencio y sois más humildes, más infantiles, más inocentes, entonces al principio será difícil ver si esos pensamientos son vuestros, surgen de la nada o alguna otra persona está enviando sus mensajes y vosotros sois los receptores. Pero no vienen de ninguna parte. Proceden del núcleo más hondo de vuestro ser... que también es el núcleo de todos los demás. (Osho)